Todos sabemos que en España los testamentos están sujetos a reglas bastante rígidas que garantizan que los herederos legales puedan llevarse hasta los dos tercios de la herencia en su conjunto. Pero incluso cuando es así, un tercio de los bienes de la persona son de libre disposición. Muchas personas optan por donar este dinero a diferentes causas, sobre todo dejándoles efectivo o bienes inmuebles a diferentes asociaciones y organizaciones.
Las Donaciones Cáncer son un buen ejemplo de este tipo de testamentos solidarios. Personas que han sufrido la enfermedad o que han tenido personas muy cerca que han tenido cáncer deciden que, una vez que se mueran, parte de sus bienes vayan destinados a esta buena causa.
Lo mejor en estos casos es que todo el mundo esté de acuerdo en esta decisión para evitar que pueda impugnarse el testamento y hacer que, de esta manera, haya una larga y costosa batalla legal. Pero lo cierto es que si la persona está bien asesorada y el testamento se redacta con un notario y legalmente, no tiene por qué haber problemas para que se cumplan sus últimas voluntades.
Otro caso es el de las personas que no tienen herederos legales y que son los que más optan por repartir su herencia entre diversas organizaciones o incluso donarla íntegramente a una de ellas que le resulte más cercana. Cuando no hay herederos legales y nadie que por tanto pueda impugnar el testamento, es mucho más fácil todo a la hora de redactarlo, ya que la persona tiene total libertad para ello.
Mucha gente desconocía que podía nombrar herederos a este tipo de organizaciones y por eso no lo hacían. Pero gracias a las campañas publicitarias de muchas de ellas y también gracias a la información que estas organizaciones suelen dar a sus socios, la gente conoce ahora esta opción y puede tomar la decisión de dejar parte de su dinero a una buena causa, sobre todo si ya donaba dinero en vida.
Las organizaciones no gubernamentales que no tienen ánimo de lucro son las más beneficiadas por este tipo de testamentos solidarios que les permiten sobrevivir en tiempos difíciles ya que durante la crisis los donativos bajaron radicalmente y, aunque han vuelto a aumentar en los últimos años, no han podido recuperar todo lo que se ha perdido durante un lustro. Estos testamentos son, sin duda, un buen complemento a sus ingresos fijos.