Saltar al contenido

Cada vez hay más personas que contratan un seguro para un perro o gato, aunque mayoritariamente lo hacen con sus perros. Existen diferentes tipos de seguros en el mercado, pero vamos a ver un ejemplo que nos indica todo lo que se puede llegar a cubrir.

Los seguros de mascotas adeslas permiten asegurar a un perro o gato para la mayor tranquilidad de sus dueños. Las coberturas básicas cubren el robo del animal y ofrecen también indemnizaciones en caso de accidente además de un seguro de protección civil. Si se contratan las coberturas completas, se cuenta además con atención veterinaria, las vacunas incluidas y quedan cubiertos otros campos como el fallecimiento por enfermedad. 

Con esta información, pensamos que hay tres razones básicas para asegurar a cualquier perro, además de las ventajas que a mayores se nos ofrecen:

  1. Para poder tener sus gastos veterinarios cubiertos. Las vacunas y las revisiones médicas del perro estarían cubiertas y no serían gastos a mayores. Pero además, también se ofrecen consejos para el cuidado del animal y se pueden realizar operaciones y otro tipo de servicios veterinarios a precios mucho más reducidos de lo habitual.
  2. Para no tener un disgusto si nuestro perro causa algún daño. Los perros con tamaño grande o carácter complicado siempre deben de ir atados y con un bozal, pero esto no quiere decir que no puedan escaparse. Y un perro pequeño y dócil también puede causar daños, por ejemplo puede soltarse de la correa y cruzar corriendo una calle causando un accidente entre dos vehículos. Incluso pueden morder a arañar a alguien porque por mucho que conozcamos a nuestros animales, sus reacciones a veces se basan en instintos que no acabamos de entender del todo.

Con un seguro de responsabilidad civil todo esto dejará de ser una preocupación porque estaremos cubiertos tanto en la indemnización que haya que abonar a la otra parte como en los gastos que pueda suponer la denuncia y la asistencia legal.

  1. Si nuestro querido perro fallece, podremos atenderlo como es debido. Estos seguros pueden incluir la incineración y la urna para tener a nuestro animal siempre con nosotros. Incluso, con pagos adicionales, se puede acceder a otros servicios. Si el animal muere por enfermedad, en algunos casos podemos tener derecho a una indemnización, algo que suele asegurarse cuando se trata de animales con un alto valor económico.

Existen diferentes tipos de viajeros. Algunos necesitan tener todo su viaje programado, desde el minuto cero hasta la vuelta a casa. Saben qué van a hacer durante cada minuto del día y su mayor temor es perder el tiempo o dejar de ver cosas importantes. Al final, sus viajes son puras maratones en las que no paran de correr de un lugar a otro y que los dejan agotados. Pero se sienten bien si han cumplido con todos sus objetivos.

A la hora de dormir, este tipo de viajeros quieren hoteles cómodos, céntricos, que no les suponga una pérdida de tiempo desde el punto de partida hasta los lugares a visitar y que además, les ofrezcan desayuno y cenas. Por eso, suelen cerrar paquetes.

Otros viajeros, por el contrario, creen que las vacaciones son para liberarse de horarios y de ataduras y prefieren improvisar. Es el tipo de viajero cuyo sueño es comprar autocaravana de segunda mano y echarse a la carretera sin un rumbo fijo, solo haciendo lo que le apetece. Con Internet no es difícil encontrar puntos en los que poder aparcar la caravana y descansar cuando se vaya agotando el día y una vez allí, ya se verá qué ruta se toma por la mañana.

Para estos viajeros lo importante es hacer lo que más les apetezca, ya sea quedarse en un maravilloso camping en el que se conoce a gente afín y se está a gusto o vagar de un lado a otro descubriendo diferentes pueblos y tipos de ocio.

Eso no quiere decir que renuncien a la comodidad, porque las caravanas modernas cuentan con todo lo que se necesita, incluso WC y ducha. Y se puede cocinar lo más básico, con lo cual no solo no se va a echar nada de menos, sino que encima se ahorrará mucho dinero porque se podrá hacer compra en el supermercado y alimentarse de comida casera.

Este tipo de viajeros valoran más las experiencias personales que el ver muchas cosas y el descanso antes de lograr objetivos. Por eso, no dudan en pasarse un día sin hacer nada, ya que lo consideran tan vital como el recorrer a fondo una bonita ciudad para descubrir todos sus tesoros y es lo que les apetece en un momento determinado.

¿Con qué tipo de viajero te sientes más identificado? ¿Te gusta planificar o dejar que la improvisación reine durante las vacaciones?