El envejecimiento facial forma parte del proceso normal de envejecimiento que siempre debemos de asumir con naturalidad. Pero si quieres combatir el paso del tiempo sobre tu rostro te ofrecemos cuatro maneras de hacerlo.
-Cambio de hábitos. Cambiar algunos hábitos puede ayudar a que la piel se mantenga más joven. Un buen ejemplo es el tabaco. El tabaco acelera el envejecimiento celular y hace que la piel del rostro se vea más apagada. Además, contribuye a la aparición de pequeñas arrugas alrededor de los labios debido a la succión continua que una persona fumadora realiza sobre el cigarro. Beber suficiente agua y alimentarse bien también contribuyen a una piel hidratada y con todas las vitaminas que necesita.
-Cosméticos. Las cremas son un buen aliado para combatir el envejecimiento facial, sobre todo en sus inicios. Ayudan a mantener el rostro con un buen nivel de hidratación y le proporcionan vitaminas y tratamientos para ayudar a conservar la tersura y el buen aspecto, así como para retrasar la aparición de las primeras marcas de expresión, las antecesoras de las arrugas. Una vez que las arrugas ya hacen su presencia en el rostro, los cosméticos siguen siendo buenas herramientas para retrasar el envejecimiento, pero para conseguir un aspecto más joven habrá que tomar otras medidas.
-Medicina estética. La medicina estética ofrece muchos remedios para el envejecimiento facial. Por ejemplo, los hilos tensores. Estos hilos se introducen con una fina cánula bajo la piel y ayudan a devolver la tersura al rostro alisando las arrugas. Estos hilos son de materiales que se absorben con el tiempo, por lo que poco a poco el rostro volverá a tener su aspecto de antes si no se realiza un retoque. Otro ejemplo son los rellenos de colágeno, que permiten rellenar esa áreas de la cara que se van hundiendo con el paso del tiempo, devolviendo el aspecto juvenil. Tampoco es un remedio permanente, igual que tampoco lo es el botox, que puede usarse de una manera sutil para conseguir buenos resultados sin alterar la expresividad facial.
-Cirugía estética. Es el último paso y uno que solo debe de darse cuando todos los demás han dejado de funcionar y tras meditarlo a fondo. Una intervención de cirugía estética puede hacer que la persona se vea más joven pero también puede transformar demasiado su rostro, como hemos visto con algunas personas famosas. Por eso, lo recomendable es realizarse solo los retoques justos y ponerse en manos de los mejores profesionales para evitar que se excedan con el bisturí.