Adelgazar sin aburrirse ni pasar hambre es posible y además muy aconsejable. Podemos preparar recetas sanas, muy apetecibles, cambiando los ingredientes más calóricos por otros más ligeros. Es el caso de la nata para cocinar, que puede ser sustituida por crema de cocina. Una opción con tan solo un 5% de grasa, perfecta para guisos, gratinados o cremas.
Crema de brócoli
El brócoli o brécol es una de los mejores alimentos para adelgazar: muy rico en fibra, agua, potasio, te ayudará a regular tu ritmo intestinal así como a eliminar el exceso de líquido gracias a su efecto diurético. Sus propiedades antiinflamatorias asociadas a su gran contenido en antioxidantes mejorarán tu piel reduciendo el aspecto de piel de naranja en muslos y caderas.
Para preparar la crema de brócoli necesitarás
• brócoli
• agua
• una pizca de sal
• un chorrito de crema ligera de cocina
La preparación es extremadamente simple: pon una cacerola ancha al fuego con agua fresca y deja que se caliente. Mientras tanto toma el brócoli y con un cuchillo separa los ramitos, dejando el tallo para otra receta. Cuando el agua hierva con fuerza, añade una pizca de sal y los ramitos de brócoli. Tapa la cacerola y cuenta 4 minutos, ni uno más. Pasado ese tiempo, apaga el fuego. Con la ayuda de una espumadera retira los ramitos de brócoli del agua y pásalos a un vaso de batidora. Añade un poco del agua de cocción: para saber la medida exacta de agua, fíjate la altura que tiene el brócoli en el vaso. Tienes que añadir agua de cocción hasta llegar a la mitad de esa altura. Ahora toma una batidora de mano y úsala para triturar el brócoli con el agua, formando una crema fina, sin grumos. ¿Te parece que ha quedado demasiado espesa? Añade un poco más de agua de cocción. Prueba la crema para comprobar si necesita un poco más de sal.
Sirve la crema en cuencos o tazas de consomé y pon en el centro de cada una un chorrito de crema ligera de cocina para añadir un toque rico, cremoso que completará el sabor y la textura de esta deliciosa crema de brócoli.